Hoy le toca su turno a una niña muy coqueta, Triana del Rocío, para la que su mamá encargó una mochila que supuso otro reto ya que me dio vía libre para hacer lo que se me ocurriese.
Seguro que en Rociana no se va a encontrar otra mochila como ésta ya que cada detalle que la compone ha sido elegido pensando en Triana y en sus gustos.
El desafío comenzó cuando me dijo su madre que a Triana le gustaban los unicornios y a su vez quería combinarla con dos colores más. Éste ha sido el resultado:
Una combinación de tela estampada de princesas, unicornios y castillos con tonos rosas palo a juego con el vestido de las princesas y turquesa oscuro a dúo con detalles del estampado.
Ribeteada en color fucsia para destacar así algunos pequeños detalles que realzan más aún los detalles del estampado.
Y como no, con su nombre, como ella quería y como lo escribe siempre, las iniciales en un color y el resto de otro.
En este caso pude presenciar la cara de la niña al ver su mochila y os puedo asegurar que sentí la misma satisfacción como cuando les enseñé a mis hijas sus mochilas terminadas. Muchas gracias Francis por confiar en mí y mis locuras y a Triana no le deseo que le guste porque puedo dar fe que le gustó mucho.
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